dijous, 8 de juny del 2017









Detrás de la rabia está la tristeza esperando para salir y dejar que nuestra emoción se libere. 
Como un río caen las lágrimas, nuestro interior empieza a liberarse. 
Asoma el cansancio de la tensión acumulada. 
Se cierran los ojos. 
Nuestro corazón empieza a recuperarse. 


Teresa Palmer